¡Hola Wilders!
Como sabéis, la mayoría de los perretes sufren ansiedad en San Juan y en general en cualquier fecha del año en la que haya fuegos artificiales y esto se debe a que al oír ruidos muy fuertes (tened en cuenta que además su capacidad auditiva es mucho mayor que la de los humanos) se produce una estimulación del sistema nervioso simpático, como respuesta fisiológica, que prepara al cuerpo para luchar contra ese peligro o huir de él.
Además, hay ciertas razas predispuestas al trastorno de ansiedad como los Border collies o los Pastores australianos por lo que habrá que estar aún más al tanto en éstos casos.
Si vuestro peludo es aun un cachorro, estáis a tiempo de evitar la fobia a los ruidos fuertes, exponiéndoles a todo tipo de situaciones habituales del día a día, como el ruido de los niños en los parques, los coches, la música, etcétera e ir aumentando progresivamente la intensidad de ruidos que pueden provocarle miedos.
Además de utilizar ciertos tips básicos de adecuación de nuestro hogar para ésos días, como por ejemplo cerrar ventanas, poner música tranquila o proporcionales una zona de seguridad donde puedan sentirse a salvo, podemos ayudarnos de productos naturales.
Y es que existe una buena alternativa a la medicación (con sus posibles efectos secundarios) y es recurrir a terapia natural, concretamente al CBD.
El CBD es una sustancia que se extrae de la planta de cáñamo o cannabis, libre de THC por lo que no causa los efectos adversos del consumo de marihuana, ni euforia, ni adicción.
El CBD funciona al interactuar con una serie de receptores que conforman el sistema endocannabinoide. Este sistema es el responsable de regular la actividad del sistema nervioso del perro, por lo que al activarse ayuda a mantener un estado mental más relajado.
Pero a parte de reducir la ansiedad, aporta muchos otros beneficios:
- Alivia el dolor: El CBD comparte rutas metabólicas con medicamentos antiinflamatorios, por lo que cada vez hay más evidencias de que ayuda en procesos inflamatorios llegando incluso, en ciertos casos, a poder sustituir completamente los medicamentos por CBD.
- Puede tratar convulsiones y la epilepsia: Se estima que el 5% de los perros sufren convulsiones y tras diversas investigaciones han demostrado que el CBD es capaz de disminuir la intensidad y la frecuencia de las convulsiones.
- Reduce la inflamación crónica y las enfermedades autoinmunes: Se ha demostrado que el CBD disminuye la producción y liberación de citocinas inflamatorias que pueden causar alergias, hipersensibilidad y autoinmunidad.
- Puede proteger el sistema nervioso y ayudar con enfermedades neurodegenerativas: Para los perros que sufren de mielopatía degenerativa y otros problemas de columna y nervios, el CBD es muy prometedor. Se ha demostrado que ayuda a los pacientes con ELA, Alzheimer y Parkinson al proteger las células cerebrales de la toxicidad. En perros mayores se ha demostrado que protege el cerebro de la muerte celular causada por los radicales libres y las toxinas.
- Ayuda a combatir el cáncer: Se ha investigado el efecto antitumoral del CBD, demostrando que detiene el crecimiento de las células cancerosas, llegando a aumentar la muerte de las células tumorales.
Si optáis por probar el CBD, os informamos que no es para uso inmediato, por lo que harán falta entre 2 y 3 semanas de suministración para que el aceite cause efecto. Y en cuanto la forma de administrarlo, podéis añadir las gotas necesarias (en función del peso del perro y la concentración escogida) en su comida o bien darlas directamente en la boca.
A continuación, os invitamos a visitar www.kaizensupplements.es donde podréis adquirir cualquiera de los dos formatos de CBD (de 5% y del 10% de concentración) y desde donde os podrán asesorar en caso de tener alguna duda.
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